Nuevas tasas de ingreso a Galápagos para su conservación
Nuevas tasas de ingreso a Galápagos para apoyar su conservación
Mochilas de HP fabricadas con 50% de material reciclado
HP presenta Fortis Chromebooks y PCs construidos para desatar la productividad, así como mochilas HP Campus Backpack, elaboradas con un 50% de materiales reciclados.
Samborondón 2030: futuro verde y desarrollo sostenible
En Ecuador, un municipio propone dejar de emitir CO2 a la atmósfera, liderando la vanguardia en desarrollo sostenible. Samborondón, una ciudad ecuatoriana comprometida con la sostenibilidad, da un paso hacia un futuro más verde con la iniciativa «Samborondón 2030». Este proyecto impulsa la reducción de la huella de carbono y convertirse en el primer Gobierno Autónomo Descentralizado (GAD) municipal de Ecuador, en dejar de emitir CO2 a la atmósfera. Parte integral de esta visión es el Plan de Sostenibilidad de Samborondón, desarrollado con la colaboración de Sambito y el Centro de Economía Circular. Este plan abarca áreas cruciales como ordenamiento territorial, vivienda sostenible, forestación, movilidad sostenible e inteligente, seguridad, empleo e innovación. La ciudad implementa acciones ambientales clave, incluyendo la limpieza de canales, gestión integral de desechos, siembra de árboles nativos y promoción de la construcción sostenible mediante ordenanzas municipales existentes. El programa Siembra Samborondón ha plantado más de 15.000 árboles en solo cuatro años, y el programa Samborondón en Bici, fomenta la movilidad sostenible para reducir la huella de carbono. El plan «Samborondón 2030» también abarca proyectos municipales para la preservación del medio ambiente. La inauguración prevista para finales de 2023 del Parque Bicentenario, el primer parque con certificación internacional de sostenibilidad, marcará un hito. Además, la ciudad está trabajando en la recuperación del ecosistema del Parque Histórico y la construcción de una planta clasificadora de desechos de última generación en colaboración con Geocycle. El alcalde Juan José Yúnez, al presentar este ambicioso proyecto, destacó el objetivo de hacer de Samborondón una «ciudad sostenible y de referencia internacional». Siguiendo los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la ciudad se alinea como una entidad del futuro, con planes concretos para crecer como cantón. Entre los logros destacados se encuentra la construcción de una planta potabilizadora de agua en la parroquia La Puntilla y la repotenciación de plantas de agua en varias zonas. Estos esfuerzos mejorarán los servicios de saneamiento de agua, disminuyendo el riesgo de inundaciones y llevando conexiones domiciliarias al 75% en la zona rural. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), ha seleccionado a Samborondón para participar en proyectos piloto innovadores, incluyendo la siembra de manglar. Este reconocimiento destaca a la ciudad como un líder en sostenibilidad a nivel mundial. José Xavier Guarderas, CEO de Sambito, explicó que la propuesta se desarrolló utilizando la metodología del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), garantizando una base sólida para la sostenibilidad en áreas clave como movilidad, construcción y economía circular. Samborondón 2030 no es solo un plan para el desarrollo; es un compromiso audaz con un futuro sostenible que coloca a esta ciudad ecuatoriana en la vanguardia del cuidado del medio ambiente y el desarrollo sostenible.
Kenia plantará 500 millones de árboles en 2023 para combatir el cambio climático
Kenia se suma a una iniciativa histórica, plantando 100 millones de árboles en un solo día, dos árboles por cada keniano. Kenia, país africano conocido por su biodiversidad y belleza natural, está dando un paso decisivo para combatir el cambio climático. Este 13 de noviembre, los habitantes de Kenia participaron en un día feriado con una misión especial: plantar 100 millones de árboles, al menos dos árboles por cada keniano, en un esfuerzo por contrarrestar los efectos del calentamiento global. Esta acción es parte de un ambicioso programa gubernamental que tiene como objetivo plantar 50 millones de árboles en 2023 y la reforestación de 15.000 millones de árboles en la próxima década. La ministra de Medio Ambiente, Soipan Tuya, expresó su confianza en que «todos y cada uno de los kenianos se apropien de la iniciativa», destacando la importancia de la participación ciudadana en la lucha contra el cambio climático. El gobierno está facilitando la participación al poner a disposición de manera gratuita alrededor de 150 millones de plántulas en viveros públicos y centros de agencias forestales. Además, se alienta a los ciudadanos a comprar al menos dos plántulas para plantarlas en sus propias tierras, fomentando la responsabilidad individual en la conservación del medio ambiente. El presidente de Kenia, William Ruto, encabezó la puesta en marcha de la iniciativa en la ciudad de Makueni, seguido por otros ministros del gabinete enviados a diversas regiones. La respuesta fue notable, congregando a decenas de personas, incluidos soldados y residentes, en lugares estratégicos, como cerca del nacimiento del segundo río más largo de Kenia, Athi. La plantación de árboles se gestionará a través de la aplicación Jaza Miti, una herramienta en línea que permite a individuos y organizaciones registrar sus actividades, incluyendo especies de plantas, número y fecha de plantación. La ministra Tuya informó que el primer día ya se registraron dos millones de usuarios en la aplicación. Sin embargo, algunos analistas expresan dudas sobre la participación masiva, especialmente en áreas urbanas, donde la rutina diaria puede dificultar la contribución al proyecto. La ambientalista Teresa Muthoni, aunque ve la iniciativa como una «muy buena idea», destaca la necesidad de una organización que garantice la participación de todos los kenianos. El gobierno también ha enfrentado críticas por no abordar la tala ilegal en los bosques, especialmente después de levantar recientemente una prohibición existente. El ministro defendió esta decisión, argumentando que solo afectó a bosques destinados a fines comerciales, representando aproximadamente el 5% del total. La meta es plantar 500 millones de árboles al final de la temporada de lluvias en diciembre, marcando un hito significativo en la lucha de Kenia contra el cambio climático. Con cada árbol plantado, Kenia contribuye no solo a su propio futuro sostenible sino también al bienestar del planeta en su conjunto.
Histórico acuerdo global para salvar a los delfines de río
En una trascendental alianza, 11 países de Asia y Sudamérica se han unido para firmar un acuerdo sin precedentes destinado a rescatar a las seis especies sobrevivientes de delfines de río en el mundo, que durante décadas han enfrentado una alarmante disminución. Ecuador, en colaboración con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), desempeña un papel fundamental en esta histórica declaración. Desde la década de 1980, las poblaciones de delfines de río han sufrido un colapso del 73% debido a una serie de amenazas, incluyendo el tráfico ilegal, prácticas de pesca insostenible, construcción de represas hidroeléctricas, contaminación originada por la industria petrolera, la minería y el uso de agroquímicos, que han degradado su hábitat de manera alarmante. La reciente y trágica muerte de más de 150 delfines de río en el lago Tefé, en Brasil, como consecuencia de la devastadora sequía en la Amazonía, pone de manifiesto que el cambio climático representa una amenaza cada vez más real para su supervivencia. El acuerdo suscrito por los Estados de Asia y Sudamérica en las áreas de distribución de estas especies tiene como objetivo detener su declive y fomentar la recuperación de las poblaciones más vulnerables. Esto se logrará mediante la implementación de medidas que mejoren las prácticas de pesca, reduzcan la contaminación, promuevan la investigación y fortalezcan la gestión de áreas protegidas y su conectividad. Roberto Troya, Director Regional de WWF para América Latina y el Caribe, enfatiza: «La Declaración Global por los Delfines de Río marca un hito en la conservación de los ríos y las especies que los habitan en América y Asia. Los países amazónicos se comprometen a trabajar en conjunto para revertir la amenaza que enfrentan los delfines de río, cuya presencia es vital para la salud de los ecosistemas y las poblaciones que dependen de ellos». Los delfines de río habitan en algunos de los ríos más importantes del mundo, como el Amazonas y el Orinoco en Sudamérica, y el Ayeyarwady, Ganges, Indo, Mekong, Mahakam y Yangtze en Asia. A nivel global, WWF ha colaborado en diversas iniciativas destinadas a promover su conservación y protección. Un ejemplo de ello es la iniciativa Delfines de Río de Sudamérica (SARDI), que ha establecido alianzas entre organizaciones con el fin de impulsar la investigación científica, rastrear el desplazamiento y el comportamiento de los delfines de río, y concienciar sobre su rol crucial y las amenazas que enfrentan. En el caso de Ecuador, el año 2023 ha sido testigo de una grave sequía que ha afectado gran parte de la Amazonía, con impactos devastadores en los principales ríos como el Napo y el Aguarico. En la Reserva de Producción de Fauna Cuyabeno, algunos lagos se han secado por completo, lo que ha resultado en la primera muerte registrada por sequía de un delfín en el Parque Nacional Yasuní. La escasez de agua también ha causado la muerte de un manatí y la desaparición de una gran cantidad de peces y caimanes en la región. Las temperaturas extremadamente altas, alcanzando los 39 grados centígrados, son inusuales y preocupantes para la conservación de estos ecosistemas. Esta crisis afecta directamente a las dos especies de delfines ecuatorianos, el Sotalia Fluviatis y el Inia geoffrensis, clasificadas como en peligro y en peligro crítico de extinción, respectivamente. La desaparición de estas especies tendría un impacto devastador en los ecosistemas de agua dulce, los cuales sustentan a millones de personas. La protección de estos delfines se ha convertido en una cuestión urgente y esencial para la salud de los ecosistemas dulceacuícolas en Ecuador. En respuesta a estos desafíos críticos, la Declaración Global para los Delfines de Río se presenta como un paso significativo hacia la protección de estas especies vulnerables. Tarsicio Granizo, Director País de WWF Ecuador, resalta: «Esta declaración establece una hoja de ruta para la recuperación de las poblaciones de delfines de río en todo el mundo, ofreciendo una auténtica esperanza para la supervivencia de estas icónicas especies. Nos complace haber desempeñado un papel clave entre el gobierno, las comunidades y la sociedad civil en esta iniciativa». La protección de los delfines de río no solo es crucial para su supervivencia, sino también para la salud de los ecosistemas de agua dulce en Ecuador y en todo el mundo. Este acuerdo global marca un hito en la lucha por la conservación de estas especies y la preservación de los ríos, que son vitales para nuestro planeta. Fuente: WWF Ecuador